ESPAÑA
Distinción
Nueva marca de ternera
La marca llegará con retraso ya que tanto ACRUGA como Ternera Gallega querían disponer de un número suficiente de canales.
10/10/2011 Feagas

La marca comercial fruto del convenio de colaboración suscrito por la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Ternera Gallega y la Asociación de Criadores de Ganado de Raza Rubia Gallega (ACRUGA) ha salido oficialmente al mercado con la presentación oficial en el marco de Expolugo.

La marca llegará al mercado con varios meses de retraso sobre el calendario inicialmente previsto por ambas organizaciones, dado que tanto ACRUGA como Ternera Gallega querían disponer de un número suficiente de canales, desde el principio, para abastecer a los potenciales clientes de este nuevo producto.

El presidente de la IGP, Jesús González, explicó que el acuerdo entre ACRUGA y Ternera Gallega fue suscrito en noviembre del pasado año y, casi de inmediato, ambas entidades comenzaron a certificar los primeros canales que iban a salir al mercado bajo el amparo de la nueva marca, pero ''eran necesarios nueve meses más para completar el proceso de cebo''.

Según el presidente de Ternera Gallega, la nueva marca podría haber salido al mercado en el mes de julio, pero finalmente las entidades promotoras optaron por esperar hasta después del verano, para disponer de más de 1.000 canales en la línea comercial, que serán distribuidas directamente a carnicerías o en bandejas de despiece para supermercados.

Jesús González explicó que las ''carnicerías tradicionales'' son las que ''más apuestan por estos productos de calidad'', porque el trato con el cliente es muy personal, y a esos negocios se les sirven normalmente canales enteros, dado que suelen tener obrador propio y se ocupan del fileteado.

Por su parte, el presidente de ACRUGA, César Dorado, reconoció sentirse especialmente ''ilusionado'' ante las perspectivas de futuro que ofrece la marca ''Ternera Gallega Suprema-Carne de Raza Rubia'', porque confía en sacar al mercado unos ''50.000 terneros al año'', a un precio que podría aportar un diferencial de unos ''0,60 euros por kilo'' con respecto a la carne convencional.