ESPAÑA
Sector ganadero
La sociedad no puede prescindir de los ganaderos
COAG Granada recuerda que el sector no podría soportar una crisis similar a la de 2007, que supuso la desaparición de 8.000 explotaciones andaluzas en 15 meses. Por eso, insta a la Junta de Andalucía a actuar para evitarlo.
21/09/2010 COAG Granada

COAG Granada advierte de que el sector ganadero se encuentra en una situación límite por los bajos precios en origen y el incremento de los costes de producción, derivados de la subida de los cereales por razones especulativas. “La sociedad europea no puede permitirse prescindir de los ganaderos porque la desaparición de la ganadería tendría gravísimas consecuencias económicas, sociales y medioambientales, además de dejarnos en una posición de dependencia alimentaria que no nos podemos permitir, ya que estaríamos a merced del capricho de los especuladores”, ha subrayado el secretario provincial de COAG, Miguel Monferrer Montoro.

En estos momentos, el sector no puede soportar una nueva crisis como la sufrida en 2007, que llevó a la desaparición de 8.000 explotaciones andaluzas en un periodo de 15 meses. Por eso, esta organización agraria reclama una mayor implicación de los gobiernos nacional y autonómico para conseguir un cambio de orientación de la Política Agraria Comunitaria. “La UE debe cambiar el rumbo y presentar una propuesta para potenciar y rearmar el sector agrario europeo. Esto no significa necesariamente más presupuesto ni más ayudas. Hay otra opción: regular el mercado con mecanismos que permitan al productor recibir precios dignos. Para ello, es imprescindible recuperar los instrumentos de gestión de los mercados que la PAC, en su proceso de liberalización, ha ido eliminando, conduciéndonos a la situación actual. Mientras tanto, China tiene casi el 37% del stock mundial de cereales, y EE.UU., el 17%”, ha dicho Miguel Monferrer. Y ha añadido: “Es posible una PAC que garantice seguridad y precios razonables para productores y consumidores, una PAC que no prime el interés especulativo, sino el interés social”.

Escalada de precios de las materias primas

El secretario de Organización ha explicado que desde principios de verano asistimos a un importante incremento del precio de los cereales en los mercados internacionales. Este incremento se inició con el anuncio de Rusia que, ante la sequía y los incendios que ha padecido, decidió restringir las exportaciones de trigo para garantizar el abastecimiento de su población. Este anuncio desató una escalada de compras en los mercados de futuro, provocando un incremento del 60% del precio del cereal, subida que se traslada al resto de la cadena agroalimentaria.

Sin embargo, aunque Rusia es una potencia mundial en cereal, la reacción de los mercados no está justificada: Frente a lo que ocurrió en 2007, las actuales previsiones de producción se sitúan en 1.745 millones de Tm. (8 millones menos de lo inicialmente previsto y un 2% menos que en la campaña anterior, cuando se alcanzó una cosecha récord). Además, existe un stock de unos 360 millones de toneladas, con una ratio respecto al consumo del 21%.

Es decir, que aunque existan elementos de explican cierta agitación en los mercados mundiales, COAG cree que actualmente la situación de la oferta y la demanda mundial de cereal no se asemeja a la de la crisis de 2007, y por tanto no se justifica la escalada de los precios. En este caso, ha habido una lectura interesada de los datos para realizar maniobras especulativas e incrementar las cifras de negocio.

Esta situación afecta al resto de la cadena alimentaria y, aunque en un principio pueda beneficiar a los cerealistas, ellos también sufrirán el incremento de los costes de producción (fertilizantes, gasóleo, etc.). Además, la subida de precio del cereal se ha producido en muchos casos cuando ya los productores habían vendido y el producto estaba en manos de las empresas, con lo que el beneficio no ha sido tan amplio. Y si nos retrotraemos a lo que ocurrió en 2008, veremos que, tras el incremento del precio del cereal que se vivió en 2007, en 2008 ese precio se desplomó, mientras los costes de producción se mantuvieron al mismo nivel que tras la subida, con lo que los cerealistas también salieron perdiendo.

Efectos en el sector ganadero

No obstante, el sector más perjudicado es el ganadero. Desde el mes de junio, los productores granadinos han vivido de nuevo una escalada en los precios de las materias primas destinadas a la alimentación animal, el principal coste en una explotación ganadera (dependiendo del sector y la actividad puede rondar el 70% de los costes totales de una explotación ganadera). A pesar de todo, y con ser importante, el incremento de precios de las materias primas no es el factor desencadenante de la crisis permanente que vive el sector, sino un elemento más, que empeora aún más la ya precaria situación de estos profesionales. El verdadero problema de estos sectores es el de los ruinosos precios en origen, que les impide obtener rentabilidad a sus explotaciones. Los ganaderos están endeudados, tienen márgenes negativos en sus explotaciones y no son capaces de soportar ningún tipo de incremento en sus costes. Además, no pueden repercutir ese incremento en el precio que perciben por sus productos.

Como ha explicado el responsable de ovino y caprino de COAG Andalucía, Antonio Rodríguez, “los ganaderos andaluces estamos dispuestos a seguir trabajando en nuestras explotaciones, promoviendo la calidad para competir con los mejores del mundo… Pero no estamos dispuestos a ser mano de obra barata. Queremos la misma dignidad que todos los trabajadores… Nuestros gobiernos, además de poner en marcha planes de empleo, deberían preocuparse por mantener el que hay, en el campo, que lleva siglos y que ahora está desapareciendo”.

Por su parte, los responsables de los sectores bovino y porcino de COAG Andalucía, Ángel Ruano y Enrique Acción, han destacado que el momento actual es especialmente delicado, porque tanto los cerdos como los novillos necesitan alimentarse de forma más intensa para alcanzar el peso que permita luego la venta en condiciones favorables. Enrique Acción ha comentado que el sector porcino vive una crisis de precios desde años, y está sumido en un proceso de reconversión para adaptarse al mercado, mientras Ángel Ruano ha recordado con amargura que los ganaderos cumplen muchas exigencias y que su actividad genera mucho empleo: “De la ganadería vive todo el mundo menos los ganaderos”.