Autores desconocidos manipularon el lunes los depósitos de tres camiones cisterna en O Corgo, Sarria y Guntín para derramar la leche que habían recogido por la mañana en las explotaciones ganaderas de varios municipios lucenses. En total, los responsables de estos sabotajes tiraron en la vía pública casi 10.000 litros, valorados por sus propietarios en unos 3.000 euros.
Los responsables de estos sabotajes, que no fueron revindicados por ninguna organización agraria, actuaron con rapidez y de forma aparentemente coordinada, dado que aprovecharon que los transportistas pararon a comer, al mediodía, para derramar los diez mil litros de leche en menos de una hora y en tres municipios diferentes de la provincia de Lugo.
El primer sabotaje se produjo sobre la una y media del mediodía, en la explanada de la Estación de Servicio de Oural, en el municipio de Sarria. En ese lugar fueron derramados los 5.000 litros que transportaba un camión cisterna, propiedad de un empresario autónomo que trabaja para varias industrias lácteas gallegas.
Una hora más tarde, alguien manipuló las válvulas de un camión cisterna que estaba estacionado a la altura del kilómetro 10 de la carretera provincial DP 1611, en el municipio lucense de O Corgo, muy cerca de una de las salidas del corredor Nadela-Sarria. En este caso, la llamada de unos particulares alertó a la Guardia Civil, cuyos agentes se ocuparon de cerrar el depósito para evitar que la leche siguiese derramándose sobre la carretera.
Sobre la calzada quedaron 1.200 litros de leche, pero la rápida intervención de los agentes de la Benemérita evitó que se derramase toda la carga del camión, cifrada en unos 12.000 litros. El vehículo pesado es propiedad de la cooperativa Copar, con domicilio social en Vilamosteiro -en el municipio lucense de O Páramo-, y su representante cifró las pérdidas provocadas en unos 363 euros.
Más o menos a la misma hora, entre las dos y las dos y media de la tarde, se produjo otro sabotaje similar en el municipio de Guntín. Autores desconocidos manipularon las válvulas de los tres depósitos de un camión cisterna que estaba estacionado en la explanada de la gasolinera de la Cruz da Veiga, lo que provocó que se derramasen sobre la calzada unos 3.650 litros de leche.
GANADEROS UNIDOS
Aunque estos sabotajes coincidieron en el tiempo con las protestas que está protagonizando la organización Gandeiros Unidos (GG.UU), uno de sus portavoces, Manuel Iglesias, negó de forma contundente que este colectivo, como tal, haya participado en esos actos, que ya están siendo investigados por la Guardia Civil.
Sí confirmó, sin embargo, que varios miembros de la organización viajarán el miércoles hasta Lugo con la finalidad de convencer a los ganaderos de esta provincia para que se sumen a la protesta del jueves y se pongan en contacto con las empresas que les compran la leche para comunicarles que no se la entregarán. Pretenden, con ello, conseguir un paro total en el sector, para revindicar unas condiciones más justas en las relaciones comerciales entre industrias y productores.
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