El suceso ocurrió ayer por la tarde cuando el ganadero Enrique Martínez volvía con su rebaño a la explotación. El afectado vio como tres lobos dispersaron el rebaño por el monte, dividiéndolo, lo que provocó un mayor número de animales heridos y sin poder recuperar. Al menos 14 ovejas muertas, 20 desaparecidas y alrededor de 15 heridas.
La explotación afectada está compuesta por más de 600 animales de raza ovina y nunca había tenido ningún ataque de lobos. Su propietario, Enrique Martínez, ha asegurado a AGROCOPE mostrarse indefenso ante esta situación “si la Administración quiere lobos que los mantenga ella”.
El pastor ha asegurado ver tres ejemplares de lobos por las inmediaciones de la localidad y ha advertido que no es raro “verlos por aquí ya que otras veces también han sido avistados”.
El responsable de Medio Ambiente de COAG, José Manuel Soto, ha pedido de nuevo al Gobierno regional que “hagan un control efectivo de estas poblaciones de lobos que están obligando al abandono de la tradicional actividad de aprovechamiento en extensivo, tan beneficiosos para el medio ambiente y el asentamiento de población en el Medio Rural”.
Ante esta situación, Soto sigue manifestando que “la Administración debe proceder a la indemnización justa de los daños, independientemente de que se cuente o no con seguro que cubra los daños por ataques de lobos”.
María José Salvador Escudero
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